Los animales llevan a cabo las siguientes funciones esenciales: alimentación,
respiración, circulación, excreción, respuesta, movimiento y reproducción:
Alimentación
La mayoría de los animales no pueden absorber comida; la ingieren. Los
animales han evolucionado de diversas formas para alimentarse. Los animales
también forman relaciones simbióticas, en las que dos especies viven en
estrecha asociación mutua.
Por ejemplo un parásito es un tipo de simbionte que vive dentro o sobre
otro organismo, el huésped.
El parásito se alimenta del huésped y lo daña.
Respiración
Esto significa que pueden tomar oxígeno y despedir dióxido de carbono.
Gracias a sus cuerpos muy simples y de delgadas paredes, algunos animales
utilizan la difusión de estas sustancias a través de la piel. Sin embargo, la
mayoría de los animales han evolucionado complejos tejidos y sistemas orgánicos para la
respiración
Circulación
Muchos animales acuáticos pequeños, como algunos gusanos, utilizan solo
la difusión para transportar oxígeno y moléculas de nutrientes a todas sus
células, y recoger de ellas los productos de desecho. La difusión basta porque
estos animales apenas tienen un espesor de unas cuantas células. Sin embargo,
los animales más grandes poseen algún tipo de sistema circulatorio para desplazar sustancias
por el interior de sus cuerpos.
Excreción
La acumulación de amoniaco y otros productos de desecho podrían matar a
un animal. La mayoría de los animales poseen un sistema excretor que bien
elimina amoniaco o bien lo transforma en una sustancia menos tóxica que se
elimina del cuerpo. Gracias a que eliminan los desechos metabólicos, los
sistemas excretores ayudan a mantener la homeóstasis. Los vertebrados poseen
sistemas excretores varían, desde células que bombean agua fuera del cuerpo
hasta órganos complejos como riñones. Los invertebrados lo hacen por difusión.
Sin embargo, es más habitual el desarrollo de estructuras específicas que realicen
la función excretora.
Respuesta
Los animales usan células especializadas, llamadas células nerviosas,
para responder a los sucesos de su medio ambiente. En la mayoría de los animales,
las células nerviosas están conectadas entre sí para formar un sistema nervioso. Algunas células llamadas
receptores, responden a sonidos, luz y otros estímulos externos.
Otras células nerviosas procesan información y determinan la respuesta
del animal. La organización de las células nerviosas
dentro del cuerpo cambia dramáticamente de un philum a otro.
Movimiento
Algunos animales permanecen fijos en un sitio. Aunque muchos tienen
movilidad. Sin embargo tanto los fijos como los más veloces normalmente
poseen músculos o tejidos musculares que se
acortan para generar fuerza. La contracción muscular permite
que los animales movibles se desplacen, a menudo en combinación con una estructura llamada esqueleto. Los
músculos también ayudan a los animales, aún los más sedentarios, a comer y
bombear agua y otros líquidos fuera del cuerpo.
Reproducción
La mayoría de los animales se reproducen sexualmente mediante la producción de gametos haploides. La
reproducción sexual ayuda a crear y mantener la diversidad genética de una población. Por consiguiente, ayuda a
mejorar la capacidad de una especie para evolucionar con los cambios del
medio ambiente. Muchos invertebrados también
pueden reproducirse asexualmente. La reproducción
asexual da origen a descendiente genéticamente idénticos a los
progenitores. Esta forma de reproducción permite que los animales aumenten
rápidamente en cantidad.
González, R, (2011).